domingo, 4 de noviembre de 2018

Espero

Espero morirme pronto.

O encontrar el pretexto perfecto para pegarme un tiro. Estoy al límite. Yo ya no soporto más.

Y no es el dolor físico lo que me atormenta hasta el paroxismo.

Es el verte al lado de otro. Del "otro".

Ver fotografías, que me roban la sonrisa, el poco humor que me queda, y las ganas de luchar.

Estoy cansado. Harto. De ser "maldito". El innombrable, aquel ser, que no debía ser, y fue, y se fue. O más bien, "lo fueron", porque en mi mano no estuvo.

Tan fácil que es agarrar el arma del calibre más alto, limar la bala de la punta, para que se parta al impacto, y colocarla en la boca, para no fallar. En la sien, puede resbalar y se puede fallar el objetivo. Que es largarse de aquí. Como digo, estoy hasta las pinches pelotas de tanto y tanto.

Estoy tan harto. Tan solo.

Tómalo como quieras, al cabo, si sucede, me valdrá madre. Te valdrá madre a tí?

Cuando te enteres. Seguirás riendo en las fotos? Sabiendo la verdad, solo tú?

No lo sé.

Estoy encabronado. Y encabronado así escribo.

Si se me antoja hacerlo, o no, lo ignoro. En un arranque, tal vez.

Que estoy loco? Quién sabe. Que soy cobarde? Quiero ver quién tiene los huevos de aguantar lo que he aguantado. A ver si le queda hocico para seguirlo diciendo.

Estoy tan cansado.

Y harto de ver esas fotos.

Si fueras sólo tú...

Patito Pafé

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