viernes, 1 de junio de 2018

Y si soñé... Acabo de despertar...

Hola Amor

Necesito escribir el sueño, porque fue un sueño de la vida anterior...

De cuánto nos conocimos

Si, iba con mi familia, y me encontraba con la tuya. Claro, contigo. En otro tiempo, otro país. En una ciudad de un puente semicircular de piedra negra, cerca del agua. Mar o río, no lo sé. El puente no estaba sobre el agua. Era más bien peatonal. Tan conocido, tan añorado, tan mío.

Nos veíamos. Y se acaba el mundo. No había nada más, nadie más. Cómo nos sucede.

Todo tan conocido. Todo siempre familiar. Todo perfecto. Yo perfecto, tú, simplemente, Espectacular, como siempre.

Si. No estoy loco. No es de esta vida. No es de esta vida. De eso estoy seguro. Muy seguro.

Pero estabas tú. Conmigo. Distintos y a la vez, Iguales.

Este Amor, viene de antes de lo que crees. Yo ya lo sabía. O lo intuía.

Un restaurante que frecuentaba la familia. Ahí te veía. Ahí nos conocimos. Comida por decir, rara. Exótica. Tan familiar. Tan rica. Un platillo en especial, que no voy a mencionar. Un postre, una natilla, con eggnog. Si. Volteada y en forma de concha. Conocidísima. Y como te he dicho, que nunca he probado.

Un panque, o rosquilla gigante. De naranja. Tan excelente como siempre. Tan añorado, tan extrañado. Qué cortabamos todo antes de tomar pieza. Riquísimo, cómo siempre. Que jamás he probado.

El restaurante, de un tal Don X. Si, mi verdadero nombre. Te digo que no estoy seguro ni del idioma, ni del país. Si, pasaba él con un conjunto musical. Con su sombrero de siempre, de toda la vida. Qué yo siempre bromeaba que era de lechuga. Parecía. Si. Conocidísimo. Cosas familiares, de toda la vida. Pero no de ésta.

Si. Te besé en el sueño. Largamente, cómo nos gusta. Besos que parecen eternos, de media tarde y que parecen unos pocos segundos.

Recuerdas que nos besábamos. Y nos anochecía?

Las mesas, las sillas. El menú. Tan especial, tan conocido. Tan rico y deseado. Sabores que reconocí. Platillos que reconocí. Siempre añorados.... Qué no he probado en esta vida.

Y tú. Por Dios. Bella siempre. Divina siempre. Un Regalo de Dios.

Eso sí. No sé si tú te llamabas como ahora, ni yo. Te digo que del lenguaje no estoy seguro, mi mente, la parte que soñaba, o recordaba, hablaba ese idioma. Casi seguro que no era español, porque hay cosas que ahora que las escribo, no tienen traducción.

Tanto detalle. El piso, el color, la textura. Tanta cosa, nada ilógico. Simplemente "familiar", Añorado. Tan mío, Tan Tuyo, Tan Nuestro.

Te Amo

Y sé que no crees mucho en esto. Y te da risa. Pero no, no estoy drogado. Hoy no tomé el clonazepam. Y eso me permite soñar, que no dormir.

Y si. También éramos pareja. También éramos cachondos. Si. Por supuesto.

Un idioma, que no estoy seguro que sea el español. Un país, que por supuesto no era en Latinoamérica. Sabes por qué? Porque no había autos. No vi ninguno en el sueño.

Sueño no. Recuerdo

De esos, que te he dicho que he tenido, que son rarísimos. Mucho más que los que son predictivos. Mucho más.

Te conozco de otras vidas. De otros tiempos. Este Amor, es de todos los tiempos, no sólo de éste.

Yo, simplemente lo sabía. Lo intuía. Ya lo comprobé.

No te rías, que es verdad. Por eso te gustan las ciudades con agua. Por eso me enloqueces.

Te Amo Liliana

P.D. tengo una hora con este escrito. Corrigiendo, agregando, etc. Espero lo encuentres coherente.

Si. Te Amo

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