miércoles, 7 de julio de 2010

Liliana

Podré andar por el camino de tus ojos
desde lejos adorando tu figura...
Tarde me parecerá la espera sin llanto,
Rozarás con tu boca mi mejilla...
Iniciaré contigo el viaje de mi vida

como el sol cuando en oriente
inicia su partida...
Amarás mi sangre renacido... Y yo
amaré tu dicha tan sencilla.

Anónimo

No hay comentarios: